Ciudades Inteligentes

miércoles, 11 de febrero de 2015

Iluminar sin deslumbrar gracias al alumbrado púbico sostenible




Desde que en abril de 2009 entró en vigor el Reglamento de Eficiencia Energética en Instalaciones de Alumbrado Exterior, se regularon las condiciones técnicas de diseño, ejecución y mantenimiento del alumbrado público, tratando de ...mejorar la eficiencia y ahorro energético..." y "...limitar el resplandor luminoso nocturno o contaminación luminosa y reducir la luz intrusa o molesta".
  En las "ciudades inteligentes" ha de procurarse luz sin caer en el deslumbramiento.

La iluminación


  Los requerimientos de iluminación urbana para los que el alumbrado público ha sido concebido deben adecuarse a las necesidades de utilización de las vías públicas definidas por el trafico rodado, la circulación peatonal y otras actividades complementarias.
  Diversos estudios e investigaciones de campo han dejado perfectamente establecido que los niveles de iluminación necesarios para el perfecto desarrollo de cualquier actividad en horas nocturnas es de unos 30 lux (medida de la intensidad luminosa). Ni tan siquiera las motivaciones relacionadas con la seguridad ciudadana pueden justificar los excesos de 60 y 80 lux que se miden en algunas calles.
  Ya no se habla de iluminación, sino de iluminación suficiente.

El deslumbramiento


  El exceso de iluminación proveniente del alumbrado público produce en nuestros ojos una sensación desagradable denominada deslumbramiento. Producido por las farolas o los reflejos de la calzada, el deslumbramiento dificulta la visión y, en algunos casos, provoca una ceguera transitoria de enorme repercusión, por ejemplo, si estamos conduciendo.
  Ello demuestra la necesidad de cuantificar el efecto de forma que se establezcan medidas para no sobrepasar niveles de iluminación que sean peligrosos para los usuarios. 
  Fruto de los datos estadísticos, se ha obtenido una escala numérica  que marca, de menor a mayor intensidad del efecto, un deslumbramiento inapreciable, satisfactorio. admisible, molesto o insoportable.

Alumbrado público LED: Ilumina y no deslumbra.


  En esto se basa la sostenibilidad: una iluminación suficiente y adecuada a  niveles racionales que minimice la luz intrusa producida con un óptimo consumo energético y medioambiental.
  O, lo que es lo mismo, en la tecnología LED:
  • Alta eficiencia energética, en valores que llegan a doblar los obtenidos por las fuentes de luz tradicionales del alumbrado público.
  • Luz totalmente direccional de forma que no existen pérdidas lumínicasni deslumbramientos por reflexión.
  • Vida útil varias veces más larga que la de cualquier luminaria convencional.
  • Residuo completamente reciclable.
  Ante este cúmulo de ventajas, no es de extrañar que Forjas Estilo Español haya incorporado a sus fabricados una línea de alumbrado público LED para Ayuntamientos, proporcionando la intensidad adecuada para el normal desarrollo de las actividades al mínimo coste energético y de mantenimiento.
  Forjas Estilo Español: Deslumbramos sin llegar a molestar.

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